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No permitas que un recuerdo intervenga en tu presente,
olvida lo malo de tu pasado y construyete un futuro.
Son recuerdos para olvidar, yo quiero encontrar mi lugar, 

alejarme de la realidad que esconde la verdad.

Mi cuento de hadas se perdió en la soledad, 

en un triste silencio, en un mar que me quiere ahogar.
Aún recuerdo tu primer beso, tu primera caricia, tu boca deslizándose en mi país de las maravillas.
Pero sigo, camino sola, pese a todo. Poco a poco voy hundiéndome, quiero salir del lodo.
Me pregunto por qué te recuerdo si quiero olvidarte, por qué te lo di todo y tu dejaste de amarme.
Simplemente pasan los días y tu sigues ahí. Yo recordando cada segundo que viví junto a ti.
Recuerdos rotos perduran en tu memoria, recuerdos buenos, malos, recuerdos de pena y gloria.
Quiero olvidar tantas cosas pero cuesta tanto.

Son espinas que atraviesan y te hacen recordar llantos.
Quiero olvidar, quiero dormir para no despertar. 

Hallar un bienestar infinito sobre una nube y descanzar por fin.
Mi fin se encuentra ya cerca, porque quiero llevarte pero en una imagen muerta, en el olvido.
Guardo tu foto y tus cartas vacías, llenas de palabras que tan solo mentían.
Recuero aquel quizás, aquel último adiós. Quiero borrar de mi mente lo que este curpo sufrió.
Son recuerdos para olvidar, para olvidar son los recuerdos. 

Son momentos permanentes en tu mente, 

aunque esten muertos es cierto que es difícil que la historia de tu vida sea un cuento.
Olvida lo malo, deja que te pierda el tiempo.
Recuerdo tantas cosas que no quiero recordar. 

Son días de soledad, en una oscuridad sin fin. 

Al menos eso parece, al principio era más fácil, porque si eres solo un niño, 

la felicidad no es frágil. 

Y no se rompe ni con transportes, ni con golpes.
¿A dónde irán los recuerdos del pasado en el presente? 

Porque  el olvido solo es una trampa para engañarse a si mismo. 

Sé fuerte y lanza tu odio hacia el abismo.
''La ignorancia hace a la felicidad'', dicen los sabios.
Quiero volver a aquellos tiempos y saborear tus dulces labios. Y olvidar tu amargo adíos. Dios nunca me ha ayudado, porque no existe una fuerza superior a lo creado.

Porque sigo en busca de amigos, alma y corazón.
Prisionera soy, mi vida está en peligro de extinción.
Me pregunto a quién le importo, quién me recordará. 

Cuando mi fin me lleve, mi historia se llevará.